Cuando la temporada de solicitudes universitarias llega a su fin, las aceptaciones, y quizás algunas listas de espera o rechazos, comienzan a llegar. Lo que puede significar tener que tomar la decisión entre más de una docena de universidades, cada una con diferentes opciones de ayuda financiera, culturas de campus y mil otras variables que pueden dejarte con muchas dudas.
Como estudiante de último año en la universidad, recuerdo lo estresante que fue la neblina posterior a la solicitud. Tuve siete aceptaciones diferentes, y todas tenían diferentes opciones de becas, especializaciones y costos.
Para cuando reduje mis opciones, me faltaba tomar una decisión entre la Universidad de Hofstra, que me había ofrecido una beca que habría cubierto la mitad de mi colegiatura, y una universidad local que prometía cubrirlo todo. Tomar la decisión entre esas dos escuelas fue la parte más difícil de todo el proceso.
Tuve que elegir lo que valoraba más: la experiencia universitaria o una vida que pudiera comenzar sin deudas.
Como yo, muchos otros estudiantes pueden tener alguna idea de en qué escuelas están interesados, pero una sóla mirada al costo de la colegiatura puede ser suficiente para cambiar de opinión. Con una deuda estudiantil estadounidense que alcanza los $1.51 billones, según el Banco de la Reserva Federal de Nueva York, no es extraño que los estudiantes duden en acercarse a las escuelas con altos costos.
Para ayudar a aliviar algunas de las preocupaciones que surgen al seleccionar una escuela, aquí hay 10 factores que consideré antes de decidir qué universidad era la mejor opción para mí:
1. Ubicación
Para muchos estudiantes, el día que te vas a la universidad es la primera vez que realmente sales de casa. Los estudiantes de ciudades densamente pobladas pueden encontrarse en un pueblo pequeño por primera vez, y los estudiantes de pueblos pequeños pueden sorprenderse por las calles concurridas de ciudades como Nueva York o Chicago.
Aunque puedes pasar por alto la importancia de la ubicación de la escuela, ten en cuenta que también marcar la diferencia. “Hay cosas a considerar más allá de lo académico y profesional”, dice Allen Koh Bio, consultor educativo de Cardinal Education.
“¿Odias el frío? Quizás no es para ti una escuela en el extremo norte. ¿Odias o no puedes vivir sin una gran ciudad cercana?” Bio agrega, “aunque estas consideraciones no deberían influenciar toda tu decisión, asegúrate de elegir una escuela que también apoye tu bienestar personal”.
También debes asegurarte de visitar el campus de una escuela potencial antes de enviar tu depósito.
Cuando tomes tu decisión universitaria, considera la distancia desde el campus hasta tu ciudad natal. Aunque muchos estudiantes optan por quedarse a unas pocas horas de casa, otros eligen escuelas en todo el país o incluso en todo el mundo.
Hay beneficios para cada opción. Quedarte cerca de casa puede significar que siempre puedes contar con tus padres si algo sale mal (o si necesitas lavar la ropa), pero muchos estudiantes disfrutan de una mayor distancia. La universidad es la primera prueba real de la independencia, por lo que tener millas adicionales puede ser mucho más liberador.
2. Carreras disponibles
Si sabes en qué campo estás interesado después de graduarte de la prepa, es importante considerar qué especializaciones tiene la escuela. Por ejemplo, si estás interesado en seguir una carrera en el cine, asegúrate de que la escuela que estás considerando realmente tenga una especialización en cine.
Por supuesto, aunque algunas escuelas pueden tener ciertas especializaciones, la calidad de esas opciones puede no ser tan alta como en otras escuelas. Un departamento de negocios recién establecido en una universidad regional no tendrá el mismo “factor sorpresa” que un título de la Wharton School of Business de la Universidad de Pennsylvania.
Asegúrate de investigar las especialidades de tu escuela. Algunas escuelas, como Georgia Tech, pueden tener un mayor énfasis en STEM, mientras que otras, como Washington y Lee University, pueden enfocarse más en las artes liberales.
Para ayudarte a evaluar las ventajas de la escuela, si estás interesado en la escuela de posgrado, sopesa qué porcentaje de estudiantes de tu especialización anticipada son aceptados en un programa de posgrado correspondiente. Si sólo el 20 por ciento de los estudiantes de pre-derecho de una universidad terminan en la facultad de derecho, puede que debas reconsiderarlo.
3. Escuelas prestigiosas
Para bien o para mal, el nombre de tu título puede marcar una gran diferencia cuando llega el momento de solicitar un empleo. Un título de la Ivy League y su red de ex alumnos pueden abrir muchas puertas para los graduados.
“Un título de la Ivy League es impactante especialmente al brindar oportunidades a los graduados en cuanto a encontrar trabajo, ganar salarios bien pagados y obtener puestos en programas de posgrado”, agrega Bio. “Por supuesto, puedes tener éxito sin un pedigrí de élite, pero las oportunidades adicionales que comienzas a recibir a partir de los dieciocho años se agravan enormemente con el tiempo”.
Estas escuelas se benefician de grandes redes de ex alumnos que pueden ayudarte durante la búsqueda de empleo.
“Este es un momento para empezar a pensar en carreras, y la universidad debería verse, al menos en parte, como una relación transaccional”, dice Bio. “¿Qué vas a sacar de tu universidad? ¿Una sólida red de antiguos alumnos? ¿El poder de la reputación institucional? ¿Un mentor en tu campo?” Si estás buscando alguna de las opciones anteriores, una escuela prestigiosa puede ser la ideal para ti.
Sin embargo, es importante recordar que aquellos que estén dispuestos a esforzarse y tener tiempo para triunfar aún pueden abrirse camino hacia el éxito en una escuela más pequeña y menos prestigiosa.
Cada escuela tiene alumnos dispuestos a ayudarte si tú estás dispuesto a buscar ayuda. En las escuelas más pequeñas, incluso puedes beneficiarte de clases más pequeñas que permiten una instrucción más personal de los profesores, lo que puede conducir a mejores cartas de referencia o ayuda durante la búsqueda de empleo.
También debes tener en cuenta los salarios esperados después de la graduación. El salario medio anual para alguien con un título en informática es de 88,240 dólares, según el Bureau of Labor Statistics.
Por otro lado, los graduados de la Universidad de Yale con un título en ciencias de la computación ganan un salario inicial promedio de $110,000 por año, según el sitio web de la escuela – más de $20,000 más de lo que puede esperar un graduado promedio en ciencias de la computación.
4. Costos de la universidad
La universidad es cara. Antes de tomar una decisión, asegúrate de conocer los costo de la colegiatura, cuotas, alojamiento y comida, y cualquier otro gasto que pueda venir con la asistencia.
También es importante que analizes cuánto aumentará el costo con cada año que estés allí.
En muchas escuelas, la colegiatura aumenta anualmente, según el Centro Nacional de Estadísticas de Educación, lo que puede significar que los estudiantes se vean obligados a pagar gastos adicionales que tal vez no hayan tenido en cuenta.
Para ayudar con esto, el College Board ofrece una calculadora gratis diseñada específicamente para mostrar a los estudiantes cuánto afectarán los costos crecientes al precio de su título. además, la Calculadora LendKey te permite determinar cuánto te costarán los préstamos privados para estudiantes mes a mes.
La ayuda financiera puede ayudarte a cubrir parte del costo, pero dado que las escuelas como la Universidad de Nueva York pueden cobrar tanto como $60,000 por año, el resto puede estar endeudándote por más tiempo del que puedes manejar de manera realista.
Si deseas asistir a una institución prestigiosa, puedes considerar tomar la decisión de asistir a un colegio comunitario durante dos años antes de transferirte a la escuela más cara durante los últimos años de tu carrera universitaria.
Los Colegios de trabajo, que son escuelas en las que los estudiantes asisten a clases y al mismo tiempo obtienen experiencia laboral ayudando en el campus o trabajando a tiempo parcial, también pueden ser una alternativa útil y más barata.
Estas opciones pueden ahorrarte cientos de miles de dólares y, al mismo tiempo, permitirte obtener ese título costoso.
5. Ofertas de ayuda financiera
Cada escuela puede ofrecer diferentes paquetes de ayuda financiera, así que asegúrate de considerar cada opción cuidadosamente. Las becas y subvenciones pueden tener un gran impacto en la asequibilidad de una escuela.
Afortunadamente, incluso si una escuela ofrece malas opciones de ayuda financiera, es posible negociar tu ayuda financiera . En una escuela más grande, puede ser menos probable, pero sigue siendo una posibilidad que puede ayudarte a asistir a la escuela de tus sueños.
Aún así, si tu escuela número uno no ofrece el apoyo financiero que necesitas, investiga cualquier tipo de becas que puedes encontrar. Hay muchos recursos disponibles que pueden ayudarte a pagar una escuela, incluso si parece fuera de tu alcance.
Sitios web como ScholarshipOwl y la LendKey pueden darte acceso a becas que pueden hacer manejable una colegiatura inasequible.
Asegúrate de mantenerte organizado para evitar el pánico que acompaña al completar una solicitud de beca en el último minuto.
Scholarships.com, específicamente, tiene una página que enumera las becas en orden de sus fechas límite, para que puedas asegurarte de tener suficiente tiempo como para completar cada solicitud. Fast Web también tiene un servicio que te envía correos electrónicos cuando se acercan las fechas límite, y las fechas límite se enumeran junto a cada opción de becas.
Dejando de lado las becas, debes completar la Solicitud gratuita de ayuda federal para estudiantes (FAFSA) cada año. Este formulario puede informarte sobre los paquetes de ayuda financiera para los que calificas y te permite recibir préstamos estudiantiles. Si tu título vale más de lo que puedes pagar, los préstamos estudiantiles serán tu mejor opción para pagarlo, lo que puede facilitar tu decisión universitaria.
Si terminas obteniendo préstamos para estudiantes, estate atento a las carreras potenciales que ofrecen condonación de préstamos. Dependiendo del camino que tomes en el futuro, el gobierno puede estar más que dispuesto a perdonar deudas a cambio de un servicio público, lo que podría ser de gran ayuda.
6. Cultura del campus
Recuerda, tu experiencia universitaria no tiene por qué ser , solamente la parte académica. La cultura del campus puede hacer o deshacer tu disfrute de la universidad.
Si estás buscando una escuela de fiestas, las universidades sin muchas fraternidades pueden no ser adecuadas para ti. Si estás interesado en vivir en un dormitorio, puede ser mejor investigar qué porcentaje de tus compañeros de estudios vive en el campus. Si el 90 por ciento de la escuela viaja diariamente, es posible que esa escuela no tenga la vida de dormitorio que deseas.
Para determinar si la cultura del campus es adecuada, visitala de antemano. Si vas a pasar de cuatro a cinco años en ese campus, debes estar seguro de que realmente disfrutarás esos años.
7. Extracurriculares
Hablando de la vida griega, considera las actividades extracurriculares. Algunas escuelas pueden ofrecer fútbol, baloncesto, hockey u otros deportes universitarios. Otros pueden enfocarse en equipos académicos como Tribunal ficticio para estudiantes de pre-derecho o Vex U para los interesados en robótica.
Algunas escuelas también pueden tener diferentes oportunidades de investigación. Por ejemplo, los estudiantes de pre-medicina pueden querer tener acceso a un hospital o laboratorio en el que puedan trabajar.
8. Reseñas de estudiantes
Lo más inteligente que puedes hacer antes de tomar una decisión sobre tu futura universidad es preguntarles a los estudiantes actuales qué piensan. Los detalles sobre las actividades diarias, la cultura del campus, la carga de trabajo y la vida en el dormitorio no se anunciarán en los sitios web de la escuela, pero los estudiantes actuales lo sabrán mejor que nadie.
Si conoces a alguien que sea estudiante actual o exalumno reciente, pregúntale su opinión. Si no lo haces, consulta sitios web como Niche y la Unigo que permiten a los estudiantes revisar sus universidades, de forma anónima o no.
También puedes usar Rate my profesors para obtener más información sobre los profesores del departamento que más te interesen. Estos recursos pueden proporcionar una gran cantidad de información sobre la vida universitaria, dentro o fuera del campus.
9. Consulta a otros
La familia y los amigos serán tus mejores aliados en la búsqueda de universidades, pero los consejeros vocacionales también pueden ser de gran ayuda. Si tu escuela secundaria tiene una oficina universitaria o profesional, asegúrate de explorar sus opciones, consideraciones y preocupaciones. Los consejeros pueden enfocarse en otras métricas clave: tasas de graduación, retención de estudiantes y salarios de ex alumnos.
Si tienes problemas para encontrar esta información, asegúrate de visitar el College Scorecard, que recopila gran parte de esta información.Por otro lado, el Centro Nacional de Estadísticas de Educación también podría ser de gran ayuda.
10. Evita las prisas
Elegir tu universidad es una de las decisiones más importantes que tomarás, así que no te sientas presionado a elegir demasiado rápido.
Tómate el tiempo que necesites para tomar la decisión adecuada para ti.
Cuando estaba tomando mi decisión, visité tanto el campus de Hofstra como el campus de mi universidad local. Hablé con los estudiantes, verifiqué las revisiones de cada institución e investigué todo lo que pude sobre las opciones de ayuda financiera y las becas. Me tomé mi tiempo para poder estar realmente seguro de qué escuela era la adecuada para mí.
Al final, decidí que no podía rechazar una beca completa, incluso si eso significaba perder toda la experiencia universitaria. La oportunidad de graduarme sin deudas era simplemente demasiado tentador para mí. Ahora, como estudiante viajera, todavía participo en actividades extracurriculares con mis amigos y aún podré graduarme con la especialidad que quería.
Lo más importante es…
Cuando decidas a qué universidad planeas asistir, considera todos estos factores. Puede ser que, como a mí, se te presente una oferta económica que no puedas rechazar. Tal vez valores la experiencia universitaria más que yo.
Elegir tu universidad es una decisión profundamente personal, así que asegúrate de no apresurarte. Considera tus opciones detenidamente y recuerda: No importa a dónde vayas, aprovecha al máximo tu experiencia. Tu carrera universitaria es lo que te iniciará en la siguiente etapa de tu vida, así que disfrútala.