La temporada de compras está en marcha y sucede casi cada vez que alguien compra electrodomésticos grandes, una computadora, un teléfono celular, un televisor de pantalla grande, un automóvil nuevo o usado y equipos de ejercicio, como una cinta de correr. Al llamar a la compra o pagar en línea, se te pregunta “¿Te gustaría comprar una garantía extendida?”

Una garantía extendida (también conocida como contrato de servicio o plan de protección) se compra por separado del artículo comprado para el que es. Al igual que el seguro de vida a término, es una forma de seguro para compras de “gran costo”.

Las garantías extendidas cubren riesgos específicos asociados con un artículo durante un período de tiempo limitado a cambio de una tarifa que pagan los clientes.

¿Son las garantías extendidas una buena idea? Muchos defensores de los consumidores dicen que no porque son un gran centro de ganancias para los minoristas. Algunos incluso han usado descripciones como “mantente alejado” y “dinero tirado a la basura”.

Sin embargo, la mejor respuesta a esta pregunta es probablemente “depende”.

Considera los siguientes factores y decide por ti mismo por cada artículo que compres cuando te hagan la pregunta “¿Le gustaría comprar una garantía extendida?”:

Frecuencia de uso

Alrededor del 10% de las garantías extendidas se utilizan alguna vez. Los electrodomésticos y artículos electrónicos generalmente no necesitan reparaciones durante el período de tiempo cubierto (generalmente de 2 a 5 años después de la compra). Tómate el tiempo para investigar las probabilidades  de que artículos específicos puedan necesitar reparaciones durante el período de garantía extendida.

Costo

Las garantías extendidas pueden ser costosas y pueden aumentar el precio de compra de los artículos hasta en un 20%. Muchos expertos en compras recomiendan comprar marcas de alta calidad con comentarios positivos de los consumidores para disminuir el riesgo de tener que reparar los artículos.

Valor

Para poner las cosas en contexto, investiga el costo medio de las reparaciones de varios artículos (por ejemplo, un refrigerador) utilizando un recurso como Consumer Reports. En muchos casos, el costo de una garantía extendida puede ser similar a una factura de reparación típica, que puede que nunca sea necesaria.

Autoseguro

Para cubrir sus apuestas sobre la necesidad de reparaciones futuras sin una garantía extendida, considera reservar varios cientos de dólares por cada artículo de “gran valor” que compres en una cuenta de ahorros asignada. Usa este dinero para reparar o reemplazar artículos según sea necesario.

Exclusiones

Las garantías extendidas a menudo contienen exclusiones como el “desgaste” normal y daños accidentales (por ejemplo, derramar café en una computadora portátil). Revisa la “letra pequeña” antes de firmar cualquier documento y también pregunta sobre el proceso para presentar reclamos y localizar proveedores de servicios, especialmente para compras en línea.

Otra cobertura

Es posible que el fabricante del producto o un programa de recompensas de tarjeta de crédito ya proporcionen cobertura de garantía extendida gratuita. Verifica qué cobertura ya está disponible y por cuánto tiempo.

Posibles excepciones a la regla

Algunos productos pueden ser buenos candidatos para garantías extendidas debido a su historial de reparación de servicio y costo. Los ejemplos incluyen teléfonos inteligentes, cintas de correr, computadoras portátiles y televisores de pantalla grande. Una vez más, investiga el historial de servicio de artículos específicos y el costo medio de las reparaciones.

Una tarifa de garantía extendida puede parecer “barata” en comparación con el costo de un artículo de gran valor con impuesto sobre las ventas, pero no es un requisito de compra. Si vas a comprar un artículo de “gran valor”, haz una investigación de antecedentes sobre varias marcas y modelos y su historial de servicio antes de que te pongan en el lugar con una decisión impulsiva.

Recuerda, también, que las compras complejas con múltiples piezas móviles y velocidad a menudo pueden conducir a malas decisiones de compra. Muchas compras de “gran costo” (por ejemplo, automóviles y teléfonos celulares) vienen con una buena cantidad de “papeleo” y algunas personas aceptan garantías extendidas para simplemente “acelerar las cosas”.